El 1º de Julio de 1974 falleció el tres veces Presidente de la Nación, Teniente General Juan D. Perón. Tras diez y ocho años de exilio forzoso, arriesga su vida, regresa al país y trae junto a su sacrificio postrero, su mensaje de Paz. Quema sus pocos días de vida que le restan en busca de la unidad de los argentinos. Adhieren a él, entendiendo su patriotismo sus propios enemigos y adversarios, encolumnándose en un propósito de recuperar la paz, trabajar juntos para el progreso de la Argentina, y devolver al pueblo trabajador la dignidad y seguridad que le fuera privada por oscuros intereses.
Los trabajadores peronistas, nucleados en las 62 Organizaciones Gremiales Peronistas cuyo secretario general es el compañero Gerónimo Venegas, hicieron posible el cumplimiento de la voluntad del General Perón, que sus restos descansaran en la provincia que le viera nacer. El 17 de octubre de 2006 se trasladaron los restos del Conductor y llama viva del movimiento Nacional Peronista, desde la bóveda familiar en el cementerio de Chacarita, a la localidad de San Vicente, donde se levantaba el monumento donde se depositaron los mismos.
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